Niño Dios
P. Lorenzo Gómez, L.C.
Niño divino, naces después del pecado, sin pecado, porque eres Dios y hombre. ¡Qué clase de hombre que no desciende del pecado! Es que siempre estuviste en Dios porque eres Dios.
Tu unidad con la Trinidad es similar a la que tenemos en tu humanidad después de la Redención. Nos lo dijiste: “Yo estoy en mi Padre y vosotros en mí y yo en vosotros” (Jn 14, 20).
No es el Espíritu Santo quien se encarna, no es la Primera Persona de la Trinidad, es la Palabra, la Segunda Persona; eres tú, Jesús. A Dios lo llamas “Padre”, lo obedeces, le pides que cambie Su voluntad, “si es posible…”. Luego nos dices: “el que me ve a mí, ha visto al Padre… ¿No crees que yo estoy en el Padre y el Padre está en mí?” (Jn 14,9).
Jesús, Dios y Hombre; el Padre y tú son una misma cosa, mutuamente se glorifican (Jn 17,1). Gracias Jesús, porque, además, nos dejas tu Espíritu, el que vino a María. Dios se hace hombre y tú, Dios-Hombre, nos haces “dioses”.
Eres la Cabeza, nosotros el Cuerpo Místico de la Cabeza: la Iglesia. Obra un hombre y obra un Dios.
Bendito Niño, no se nos ha dado otro nombre bajo el cielo que tu Nombre, Jesús. La persona divina del Verbo se hace hombre para compartir nuestra condición.
A nuestro pecado respondes con tu Divina Misericordia y con la Redención.
A los deseos de nuestro corazón, respondes con un amor sin límites.
A nuestros temores, con cercanía.
A nuestro sufrimiento, respondes compartiéndolo y dándole sentido y valor.
A nuestros deseos de grandes cosas, respondes con el ideal más grande que Tú mismo.
A la muerte, con la vida. Gracias, Niño Dios.
A la sed de lo infinito, con la eternidad feliz en unión contigo.
Que toda nuestra experiencia cotidiana sea una ocasión para acercarnos a Ti.
Si estamos tristes, para encontrarte en la alegría.
Si hemos pecado, para encontrarte en el perdón.
Si nos pesa el camino, para encontrar tu descanso.
Si estamos alegres, para agradecerte y para compartir tu triunfo.
Así, toda experiencia humana será para nosotros experiencia de Navidad y así podremos comenzar el nuevo año diciendo: “No soy yo, ¡es Cristo quien vive en mí!”.
3 comentarios
Padre Lorenzo, que hermosa reflexión. Feliz Navidad y felicidades también por su aniversario sacerdotal.
Padre Lorenzo yo escucho todos Los dias su santa Misa le pido oracion por mi sobina Ruth Victoria Villalta nacio de 23 semanas y ha tenido muchas complicaciones de salud aun se encuentra en la encubadora ya le hicieron cirujia en su corazon sus pulmones aun no se le han desarrollado se ha mantenido con oxijeno todo este tiempo y eso le esta afectando la retina pido sus oraciones. Padre Lorenzo grasias
Grasias Padre Lorenzo Dios lo bendiga a usted y todos Los de Guadalupe radio Feliz navidad